martes, 17 de noviembre de 2009

¡Buenas!

aquí estamos otra vez, hablando de la Encantadora...
Bueno, como ya os he dicho, este blog quiere ser un portal abierto a todos aquellos estudiantes que estuvieron (o estarán) de Erasmus en Granada, para obtener consejos sobre cómo salir de varias situaciones difíciles que se pueden presentar a lo largo de la permanencia ahí.

Vamos a ver, entonces, cuáles son los primeros problemas con los que hay que enfrentarse:

1. El primer asunto es el de la lengua que, aún si uno conoce perfectamente el idioma, puede resultar muy problemático. De hecho, los granadinos (y los andaluces, en general) hablan un español/castellano muy cerrado, no pronuncian muchas letra (sobre todo las "s")...¡ se lo comen todo!
Esto, con el tiempo, puede resultar divertido al oído, pero os aseguro que los primeros días constituye un verdadero problema...os pongo unos ejemplos:
- ¿Oye, qué 'amoh a hacé de comé? (...esto es lo que un granadino pronunciaría para decir: ¿qué vamos a hacer de comer? )
- Leemoh el tehto a la página doh (que traducido al "castellano" sería: leemos el texto a la página dos)
- ¿pá llevá o pá comé aquí? = ¿para llevar o para comer aquí?
Ahora os cuento cuál fue mi primera aventura con este idioma tan raro: pues, es muy simple...al llegar al aeropuerto tenía que ir a la estación de autobuses: le pido al conductor que me ayude, que me diga dónde tengo que bajar; resultado: el tío empieza a hablar conmigo, me cuenta anécdotas sobre Granada y sobre la vida ahí...¡y yo, con cara de tonta, sonrío y hago "sí" con la cabeza...pero no estoy entendiendo nada de nada! Me parecía estar en otro País, os lo juro, ¡me parecía chino! jajaja...pero al final todo fue bien: encontré la estación y pude empezar a buscar piso...

Y esto del piso es el segundo problema del que vamos a hablar hoy:

2- EL PISO: la Universidad de Granada no tiene alojamientos para los estudiantes, ni siquiera para aquellos que vienen de fuera, participando a un proyecto internacional. ¡Hay que buscarse la vida solos y ser apañados!
Tan difícil no es, considerado el hecho de que Granada es una ciudad acostumbrada a tener miles de estudiantes, también erasmus.
Todo lo que hay que hacer es comprar una tarjeta telefónica de 12 euros, una agenda en la que se apuntan los números y las direcciones, tener zapatillas buenas porque habrá que andar muchísimo (sobre todo porque no se conoce todavía la ciudad) y un buen mapa; se empieza por las cabinas de los teléfonos públicos, los palos de la luz, los paseos de la facultad y los periódicos: se cogen papelitos y se empieza a llamar y a fijar citas para ver los pisos (esto de llamar es otro problema, porque si volvemos al punto 1 podemos fácilmente constatar que hablando por teléfono es muy difícil entenderse).
Y ya está...¡en dos o tres días, como mucho, habéis encontrado un piso que os guste!
Mientras tanto podéis reservar una habitación en un hostal (en Granada hay un montón de hostales, pensiones y pequeños hoteles baratos).

Por ahora terminamos aquí, ya que por fin ¡hemos encontrado piso y tenemos tiempo para instalarnos!

¡Hasta la próxima!

miércoles, 11 de noviembre de 2009

¡ Bienvenidos !

¡Hola chic@s!

Me llamo Eleonora, soy una estudiante italiana de 23 años y estoy literalmente enamorada de España.
Hace dos años pedí la beca Erasmus para poder estudiar un año en la Universidad de Granada y, afortunadamente, la gané...
¿Por qué Granada?...Pues, no lo sé. ¿Sabéis cuando, desde pequeños, tenéis un pensamiento fijo en la cabeza? A mí me pasó esto: quería ir a Granada, sin explicación, sin saber porqué. Conseguí hacerlo, y hay que decir que fue la experiencia más emocionante de mi vida.
Estudié allí un año, en la Facultad de Filosofía y Letras y luego, al año siguiente, me quedé para trabajar de prácticas en la oficina de la Federación Provincial de Hostelería y Turismo de Granada.

Este blog quiere ser una oportunidad para compartir ideas, experiencias, para preguntar y para contestar, para aclarar aquellas dudas que cada uno de nosotros pueda tener antes de hacer un viaje o antes de enfrentarse con una experiencia como puede ser el proyecto Erasmus.

Lo primero que quiero compartir con vosotros es algo que escribí unos días antes de coger el avión, para enseñaros cuáles eran mis sensaciones, mis emociones, mis miedos...

"Venga, sólo faltan dos días...esta vez no se trata de una ilusión, esta vez va a pasar en serio...
Esta vez me voy para estar fuera bastante tiempo...
Agitación y ansiedad se mezclan con las ganas de volver a empezarlo todo, por fin, desde el principio, desde cero, otra vez: otro desafío en mi vida del que soy protagonista.
Quiero ponerme a prueba y ser lo suficientemente valiente para dejarlo todo y empezar otro camino, para cerrar capítulos ya leídos, para tirar a la basura aquella parte de mi pasado que ya no me gusta. Mi cabeza en este momento está llenísima de pensamientos...mi cerebro sigue dándole vueltas a las cosas...¡quién me conoce sabe cómo estoy ahora!
Hay que ser fuertes, hay que tomar esta oportunidad como un regalo que alguien nos ha querido hacer para darnos la posibilidad de conocernos a nosotros mismos...
Ya está, ya basta...¡¡parece que me he convertido en una filósofa!! :o)
...Granada...¡allá voy!"

Jajaja...volver a leer estas palabras ahora es bastante divertido, la verdad, pero también me transmite sensaciones extrañas, de melancolía, porque me estoy dando cuenta de lo emocionada (¡y con razón!) que estaba en aquellos días...

¡Bueno chic@s, ahora os dejo, pero os pormeto que pronto os voy a contar más cosillas interesantes divertidas y útiles sobre esa increíble ciudad que es Granada!

¡Un besazo!